miércoles, 1 de septiembre de 2010

LA CUENTA ATRÁS

Me hubiera gustado conocerte antes.

Antes de mis "Lo siento, pero no quiero nada serio con nadie". Antes de montarme en estos aviones de papel que yo me construyo a mi antojo, que se dejan llevar por cualquier brisa o vendabal, con tal de que no me lleven a ninguna parte.

Ahora solo porto en mi maleta planes, y por más que busco y rebusco en el fondo de mi baúl no tengo ningún ancla que echar en el mar de esta playa. Ni siquiera poseo un papel escrito, unas palabras en servilletas que sirvan de guía, que dejen ver un mal proyecto para dos. Sólo me rodea mi burbuja egoísta, todo lo que tengo en mi cabeza son yos, mis, mes, para mi,..., "sintigo".

Este verano ha sido un impostor, capaz de hacernos confundir la nieve con la espuma de las olas, los Alpes con los castillos de arena, los días de sol contigo con los días de soledad con nadie.

Sin embargo, ahora que me he despedido de ti, y de la peor manera posible (lo admito), y que sé que esto no lo leerás nunca, puedo decírtelo. Decirte que sí, que me hubiera gustado conocerte antes, y ser capaz de ofrecerte lo que me das, darte las miradas con las que me miras (sí, esas que hacen que me corte, y que me ría porque no sé muy bien que hacer con ellas), devolverte los besos que me robas, abrazar los brazos con los que me abrazas. Atreverme a decirte aquello que tus oidos quieren oir y que mis labios no dicen, esas frases que expresen un "te echaré de menos", "ahora no tengo ganas de irme"...

Porque sé que todo este tiempo sólo has estado esperando una cosa, a que te dijera: Vente conmigo.